Entrega de Reconocimiento a Ópticas “Otto Milke”

En un ambiente donde privó la calidez humana y familiar el Patronato Pro Historia Peninsular de Yucatán A. C. hizo entrega de un Reconocimiento a la empresa Ópticas “Otto Milke”   en un evento que se realizó en el auditorio José Díaz Bolio del Centro Cultural Prohispen  la noche del martes primero de marzo del año en curso.

En el trascurso de la velada la Sra. Anahí Meyer Riera dio lectura a una semblanza de este negocio  que fue fundada en 1879  por el Sr. Otto Milke Werner quien llegó a Yucatán procedente de la región de Hamburgo, Alemania. Posteriormente se presentó la genealogía familiar y acto seguido los hermanos Erik y Otto Milke Novelo, representantes de la quinta generación, disertaron sobre los servicios ópticos que durante 137 años han prestado en la Península de Yucatán y el Sureste de México, agradeciendo también el apoyo que han recibido de su madre.

La señora María Cristina Novelo Erosa  viuda del Sr. Otto Milke Rosado puntualizó los esfuerzos que ha realizado en diversas actividades productivas, como la cría de pavos, para apoyar con las ganancias obtenidas a la citada óptica y a su difunto esposo, así como en la educación de sus hijos, señalando que la familia unida, que trabaja unida, es un aliciente para sacar adelante a cualquier tipo de empresas que se propongan realizar.

Por su parte el empresario Juan Manuel Ponce Díaz, quien hizo entrega del Reconocimiento, explicó que es algo extraordinario y regocijante el que una empresa familiar continuara trabajando  un negocio de óptica fundada en el siglo XIX e indicó que estadísticamente muchas empresas quiebran en tres o cinco años de fundadas y se dan casos de que las familias disuelven a las empresas o las empresas disuelven a las familias.

Erik Milke Novelo, Juan Manuel Ponce Díaz  y Otto Milke Novelo durante la entrega del reconocimiento.

Finalmente, la Sra. Margarita Díaz Rubio, presidenta de Prohispen, quien condujo la ceremonia, expresó que es estimulante la presea otorgada, siendo ésta la número 16, del programa de Reconocimiento a Empresas que tienen 100 años o más de haber sido fundadas y que permanecen en manos de la misma familia, y añadió que este programa empezó en el año 2002 siendo la primera en recibirlo la Lencería Casa Álvarez. Luego invitó a los presentes a un vino de honor que se realizó en el Jardín de los Montejos.